- Echóme a su pescueço, por las buenas respuestas,
- y a mí non me pesó porque me llevó a cuestas;
- escúsome de passar, los arroyos y las cuestas,
- fiz de lo que y passó las copras de yuso puestas.
Cántica de sserrana
- Passando una mañana por el puerto de Malangosto,
- salteóme una serrana a la asomada del rostro:
- Fademaja, diz: "¿Dónde andas? ¿Qué buscas o qué demandas
- por aqueste puerto angosto?"
- Díxele yo a la pregunta: "Vome fazia Sotosalvos."
- Diz: "el pecado barruntas, en fablar verbos tan blavos,
- que por esta encontrada, que yo tengo guardada
- non pasan los omnes sanos."
- Paróseme en el sendero, la gaha, roín, heda:
- A la he, diz: "Escudero, aquí estaré yo queda
- fasta que algo me prometas, por mucho que te arremetas
- non pasarás la vereda."
- Díxele yo: "Por Dios, vaquera, no me estorves mi jornada,
- tírate de la carrera que non trax para ti nada."
- Ella diz: "Dende te torna por Somosierra trastorna,
- que non avrás aquí passada."
- La Chata, endiablada, que Santillán la confonda,
- arrojóme la cayada y rodeóme la fonda,
- enaventóme el dardo, diz: "para el padre verdadero,
- tú me pagarás oy la rroda."
- Fazía nieve e granzava, diome la Chata luego,
- fascas que me amenazava: "¡Pagan, si non verás juego!"
- Dixel yo: "Par Dios, fermosa, dezirvos he una cosa:
- más querría estar al fuego."
- Diz: "Yo levaré a cassa y mostrarte he el camino,
- fazerte he fuego y blasa, darte he del pan y del vino;
- ¡alaé! promed algo y tenerte he por fidalgo;
- ¡buena mañana te vino!"