- Yo, con miedo y arezido, prometil una garnacha
- y mandél para el vestido, una bronca y una pancha.
- Ella diz: "Dam más amigo, anda acá, trote conmigo,
- fnon ayas miedo al escacha."
- Tomóme rezio por la mano, en su pescueço puso
- como a çurón liviano y levón la cuesta ayusso:
- "Hadreduro, non te espantes, que bien te daré qué yantes,
- como es de la sierra uso."
- Pússome mucho aína, en una venta con su enhoto;
- diome foguera de enzina, mucho gaçapo de soto,
- buenas perdizes asadas, fogaças mal amasadas
- de buena carne de choto.
- De buen vino un quatrero, manteca de vacas mucha,
- mucho queso assadero, leche, natas y una trucha.
- Dize luego: "Hadeduro, comamos d'este pan duro,
- después faremos la lucha."
- Desque fui un poco estando, fuime desatiriziendo,
- como me iba calentando, ansí me iva sonriendo;
- oteóme la pastora, diz: "Ya, compañón, agora
- creo que vo entiendo."
- La vaquera traviesa diz: "Luchemos un rato;
- liévate dende apriesa, desbuélvete de aques hato."
- Por la muñeca me prisó, ove de fazer quanto quiso:
- creo que fiz buen barato.
De lo que conteçió al arçipreste con la sserrana
- Después d'esta aventura, fuime para Segovia,
- non a comprar las joyas para la Chata novia;
- fui ver una costilla de la serpiente groya,
- que mató al viejo Rando segund dize en moya.
- Estude en esa çibdat y espendí mi cabdal,
- non fallé polco dulçe nin fuente perhenal;
- desque vi que la mi bolsa, que se parava mal,
- dixe: "Mi casilla y mi fogar çient sueldos val."